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martes, 20 de marzo de 2012

Hoy toca plaza




Este sábado había plaza, como decimos en mi tierra, es decir hay un mercado de frutas y verduras en la Plaza Mayor, que se lleva haciendo desde tiempos inmemorables. Yo en esos tiempos aun no existía, pero sí que lo hacía hace treinta y tantos años.

Recuerdo como todos los sábados me iba de compras con mi madre, sin fallar ni uno, hiciese calor o frío, allí nos presentábamos a elegir las mejores piezas de la fruta o de la verdura que tocase, según la época. Se vendían animales vivos de los cuales yo huía despavorida, siempre me dieron miedo.

Era divertido, se regateaba con el precio, hasta que conseguía el que ella quería. Siempre había mucha gente vendiendo como comprando. Pero también conocí la otra parte, la de vender.

En mi casa había nogales y cuando era la época se llevaban a vender las nueces verdes. Mi tía era la encargada de hacerlo, y a mí me encantaba estar con ella, viendo como pesaba con una báscula de pesas, llamada romana, y como me enseñaba a pesar, cuando casi yo no podía ni con ella.

La gente de los pueblos venía tanto a comprar como a vender, y mi abuelo no iba a ser menos, él traía las nueces, y mientras nosotras las vendíamos, se pasaba por cada puesto saludando a personas que conocía. Era una imagen que se repetía sábado a sábado. El siempre venía a la plaza de los sábados para luego ir a tomarse el chato, como se decía en aquella época. Más de una vez fui con él, mientras se tomaba su vinito, le ponían unas tapas de callos, o de asadurilla o de sangre. De todos esos sitios, hoy en día, existen muy pocos, o si me pongo a pensar diría que uno nada más.

A medida que fui creciendo, y empecé a trabajar, ese quehacer del sábado lo fui perdiendo del todo, hasta pasarse años sin volver.
Hace poco lo he vuelto a retomar, y más de un sábado vuelvo a esa Plaza Mayor. Si cierro los ojos, casi puedo sentir las mismas sensaciones que tenía cuando era una niña y me acercaba por allí, y escuchar las voces de las personas ofreciéndonos sus productos:

¡¡A la rica lechuga fresca!!

¡¡Las mejores zanahorias de la comarca!!


Quedan pocas personas que se anuncien así, pero aun alguna queda. Ahora las grandes superficies se quedan con todo el mercado de alimentación, esto es el progreso.

 Las sensaciones que te quedan de algo pasado, cuando de repente vuelves a sentirlas, es como si los años no hubiesen transcurrido, y siguiera siendo esa niña que disfrutaba de estas pequeñas cosas.






52 comentarios:

  1. Hola, Simplementeyo

    Qué alegría volver a leerte :D.

    En San Sebastián había dos mercados tradicionales, en los que las caseras vendían a diario los productos de la huerta, de los animales; las pescaderías traían el pescado diario, etc.

    Recuerdo soler ir con mi abuela a uno de ellos y con mis padres al otro.

    Ahora estos mercados se han modernizado, siguen habiendo puestos de caseras, pocos, pescaderías y carnicerias, pocas, que comparten espacio con dos supermercados. Todo junto, ajajajajaj.

    Aún recuerdo a las pescatederas, a las puertas de la Brecha, a voz en grito, dicendo "bokarta, anchoas".

    Me has hecho recordar unos momentos muy bonitos :D.

    Tenía que ser divertido recoger las nueces y venderlas en el mercado ;).

    Besotes.

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    1. Hola Mº Eugenia.
      Muchas gracias, por aquí ando otra vez:)

      Veo que los recuerdos de los mercados los tenemos todos, dependiendo de la zona se vendía una u otra cosa, que había un sabor especial, ya sea porque ibas con personas queridas que no están ahora o simplemente porque en aquella época todo nos llamaba la atención.

      Para mi si que fue divertido.

      Muchas gracias de nuevo.

      besitos y sonrisas frescas como las anchoas :-)

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  2. Me has hecho reverdecer laureles de antaño, los entrañables mercados y hasta recordar la feria de ganado.
    He vuelto a sonreír pensando en los ayeres con olor a nogal y sabor a la "rica lechuga fresca"
    Un beso.

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    1. La feria de ganado era muy cerquita a donde yo vivía y esos días no había por donde pasar, gente por todos los sitios, animales y un olor que siempre decía a mi madre que no me gustaba jeje.

      Me alegra que hayas vuelto por unos momentos a esos ayeres:)

      Besitos y sonrisas con olor a nogal :-)

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  3. No pierdas esta costumbre porque se siente claramente que te ha hecho feliz y no hay nada más estupendo que sentir a la niña que llevamos dentro.

    Besotes!

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    1. Espero no hacerlo, esa niña de vez en cuando florece y recuerda, gracias por recordármelo.

      Besitos y sonrisas de niñez :-)

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  4. Me he dado cuenta paseando entre tus entradas que llevo mucho tiempo sin venir a estar contigo y mi aptitud es imperdonable porque entre otras cosas me he perdido hasta tu cumpleaños, por cierto ¡felicidades niña!. No tengo excusa, si pero no perdón aunque te lo pido. La verdad es que sigo a tantos blogs que en el escritorio se me pierden los amigos
    LO SIENTO MUCHO
    Un beso

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    1. No te preocupes no pasa nada, tranquila, me doy por felicitada y te lo agradezco, no tienes que disculparte.

      Ya veo que lo de ir a la plaza no solo se dice en mi tierra, jejej me gusta esa expresión y se guro que tu también te lo pasabas genial haciéndolo.

      Gracias por venir.

      Besitos y sonrisas recordadas :-)

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  5. Ah! que se me olvidaba a mi también me encantaba ir a la Plaza el sábado con mi madre
    Más besos

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  6. Yo lo que conocía de esa época es el rastro de Madrid que era de obligado cumplimiento el regatear,pero esa costumbre del regateo ha desaparecido,ahora lo tomas o lo dejas.

    Pero si estoy deseando marcharme a la costa ya que allí todos los domingos ponen un mercadillo de fabula.

    Bienvenida sea voes mi estimada Simplemeteyo.

    Saludos

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    1. Muchas gracias Jose, por aquí ando de nuevo:)

      Aquí lo del rastro como lo conocemos ahora llegó mucho mas tarde, y yo el de Madrid lo conocí hace mas de 30 años y no he vuelto, tendré que darme una vuelta por él jeje.

      En la costa hay mercadillos en todos los pueblos, yo también de vez en cuando me paso por ellos cuando me voy de vacaciones.

      Besitos y sonrisas sin regateo :-)

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  7. Pues mira yo no tengo esos recuerdos, creo que nunca fui con mi madre a la plaza o si lo hice fueron tan pocas veces que no las recuerdo. Pero si recuerdo ver a mi abuelo cargar la bicicleta con dos cestas de verduras y llevarlas a la plaza. El tenia una huerta a las afueras y algunas cosillas las vendia. Cuando mas he ido a la plaza es de mayor y no dejo de reconocer que tiene mucho encanto, que estar alli es como si el tiempo se detuviera, siempre me hace recodar que asi se compraba antes y que es una manera mucho mas humana.Lapena es cuando nieva o llueve ver esos puestos vacios.Y eso de los vinitos al mediodia... me encanta ;) Comer esas tapas tan "autenticas" con los sabores de antaño es una gozada.Ojala no se pierdan estas tradiciones. Bienvenida flor. Un bessito enorme

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    1. Hola reina:

      Pues no vivías muy lejos de la plaza, lo tenias cerquita, cerquita, jejej, pero son costumbres de cada casa, que luego vas adquiriendo tu para la tuya. Como ves recuerdas a tu abuelo que iba a vender a ella, eso pasaba mucho, se vendía lo que se tenía.

      Esa sensación que tienes de que se para el tiempo cuando vas allí, es la misma que tengo yo, y si encima la acompañamos con los "chatos" no te digo mas jejeje.

      Muchas gracias por tu bienvenida:)

      Besitos y sonrisas con sabor a antaño :-)

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  8. En mi pueblo hace mucho apenas venían 4 ó 5 puestos y estos pagaban al pregonero para que lo anunciase. Era entrañable este ritual. Un beso.

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    1. Je, me encanta esa tradición, anunciarlo con un pregonero, no tengo recuerdos de los pregoneros, solo lo que he visto en las pelis.

      Gracias por recordar conmigo.

      Besitos y sonrisas pregonadas :-)

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  9. Creo que es una tradición que no se ha perdido, al menos no en los pueblos.
    Cierto que en las grandes ciudades ya se ha sustituido por los mercados centrales o mercados cerrados que abren todos los dias del año, pero en los pueblitos como el que viven mis padres y donde yo nací, todos los martes del año hay "mercat"... y las mujeres bajan con sus carros para llenarlos de frutas y verduras frescas, aunque tambien venden zapatos, ropa y cualquier producto que puedas imaginar.

    A mi me parece algo especial ir al mercado, sobre todo porque allí te encuentras con muchos vecinos del pueblo y siempre estás más rato hablando con unos y otros que comprando...

    Besitos mediterráneos.

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    1. La esencia del mercado en las zonas del Mediterráneo no se ha perdido, me encantan esos mercados de tu tierra, son diferentes a los de la mía, aquí solo hay frutas y verduras, bueno la verdad es que ahora han puesto algun sitio de ropa, pero apartado del centro de la plaza, es diferente.

      En las grandes ciudades, la prisa no deja ir a estos sitios, cargas en el super y ya jeje.

      Besitos y sonrisas con sabor mediterráneo :-)

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  10. Bonita entrada.

    Yo soy mucho de mercados, le dan vida a una ciudad. En mi pueblo no lo hay de frutas y verdura, como este del que tú nos hablas, por aquí está el típico mercadillo de ropa. El mercado como tal, se está muriendo en mi pueblo. El lugar donde se encuentra ubicado no es el más apropiado, ya que carece de aparcamientos, y somo sabes, hoy todo el mundo hace la compra en coche. Sus instalaciones son deficientes, en invierno hace un frío terrible y en verano una calor insoportable, con la consiguiente merma de los productos que allí se venden. Por todas estas razones, el mercado de mi pueblo está agonizando.

    Cuando vivía mi padre, era una costumbre el ir los dos juntos, todos los sábados por la mañana a hacer la compra. Mi padre disfrutaba con el pescado fresco, lo sabía apreciar de veras. Hoy en día me da pena que el mercado esté perdiendo su protagonismo y sean las grandes superficies las que se llevan a los clientes. La frescura y la competitividad de precios que encuentras en un mercado, jamás las encontrarás en las grandes superficies.

    Me has hecho recordar esos sábados de compra con mi padre. Muchas gracias.

    Un abrazo.

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    1. Muchas gracias Gloria:)

      Que lástima que esté agonizando, esas tradiciones no se deberían de perder, es otra opción mas de compra, que teniendo tiempo, para mi tiene su encanto.
      No se si los gobernantes de los lugares como el tuyo quieren que eso desaparezca y no facilitan las cosas a los ciudadanos, es una pena.

      Los supermecados son una necesidad y los mercados un placer, sobre todo cuando se recuerda con quien ibas, y lo feliz que te hacía sentir, aunque esas persones no estén aquí, en el recuerdo siempre van con nosotros.

      Besitos y sonrisas recordadas :-)

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  11. Holaaaaaaaa SIMPLEMENTETÚ,

    quise acercarme en cuanto vi tu comentario, pero como tantas veces se me complicó la madeja... Mmmmm ¡¡así que te atacó un poquito la astenia primaveral! ¡¡cachiiisss!! ¡¡Ojalá vuelvan las ganas con este color a recuerdos preciosos de tu infancia!! ¡¡cuantas veces paseé por esa plaza los domingos!! recuerdo que cuando yo iba, lo que se vendía no era fruta como los días de mercado de los que hablas, eran baratijas, quincalla de todo tipo, intercambio de comics, artesanía, mil cosas cuya utilidad era más que discutible pero que visitábamos antes de tomarnos unos vinitos de vuelta por le barrio húmedo.. e incluso por ahí había no sé si aun los hay barecillos de chupitos... Mmmm León ¡¡vaya recuerdos me trae cielo!! mil gracias por refrescarme la memoria... aunque la mía no sea de mi infancia y no haga tanto de esto que te cuento:-)

    Mira, para que te animes te voy a enlazar a mi hermano jajaja mi hermano de verdad que también es bloguero así te lo presento oficialmente, verás acabo de leerle una entrada ( el escala, esquía corres en fin no para :-) en la que comenta lo que en un pueblecito de León que ni conozco hacen sus autoridades, me ha parecido lago taan bonito que te lo dejo por si quieres darte un día una vuelta por allí, sólo por el ambiente humano que parece se respira allí merece la pena... A ver si te gusta yo sólo por la parte de leonesa que tengo me he sentido orgullosa de que cosas así se hagan en nuestra tierra...

    Si es que somos los mejoooooooores jajaja ¡¡venga cielo!! ¡¡anímate!! llegó la primavera con sus males y su bienes pero si la miras de cerca siempre preciosísima como tú.

    Un beso inmeeeeeeeeeenso cosa bonita y sonríe por favor, si se apaga tu sonrisa aquí en la blogosfera se nubla el sol :-)


    Muaaaaaaaaaaaaaaaaakss a montones.... con sobre dosis de rayos solares sonrientes, con doble ración de endorfinas para ti directas en vena

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    1. Hola guapísimaaaaaaaaaaaaa:)

      Aquí ando de nuevo, debe de ser la primavera si o la prima vieja, o la cualquier prima jajajaj.

      Efectivamente los domingos en la plaza había un rastrillo de cosas, que te dabas una vuelta y era la excusa perfecta para irte de vinitos jejej, pero como bien dices eso tardó mucho en venir, es que tu eres una pipiola jaja.

      Muchas gracias, ya he entrado en el blog de tu hermano y me ha encantado la entrada, ya lo fisgaré con mas detenimiento, porque si es un cazurro como nosotras hay que hacerlo con detenimiento :)

      Muchas gracias eres un encanto como siempre, para no animarse contigo, que eres polvorilla pura :)

      Aquí ahora está nublado pero en mi rinconcito sale ese sol que mandas tan especial, muchas gracias María.

      Besines y sonrisas sin nubes :-)

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  12. Es que seguimos siendo esa niña, siempre está dentro de nosotras, como bien dices, cerrando los ojos... volvemos.. Bss

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    1. Pues cerremos los ojos y y volvamos a nuestra niñez con los mejores sabores de esa época, al final siempre queda lo bueno.

      Besitos y sonrisas con sabor a niñez :-)

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  13. Hola, Simplementeyo

    Esta tarde he estado en uno de los mercados modernos que antiguamente fue tradicional. Y me ha acordado de ti y de esta entrada. Porque donde antes había puestos de caseras que vendían unos tomates, lechugas, y verduras estupendas, ahora hay un Zara de tres plantas.

    Por lo menos, queda una planta en donde hay cinco puestos tradicionales donde aún venden los productos de sus huertas.

    Besotes.

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    1. Hola guapísima:

      Que lástima lo que me dices, pero esto es el progreso dicen.

      Gracias por acordarte de mi:)

      Mas besitos y mas sonrisas :-)

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  14. Los tiempos cambian, no hay duda... pero lo bonito y lo tierno que suena todo lo que nos cuentas :) Es una pena que perdieras la costumbre, pero es comprensible que los quehaceres dejan sin tiempo... y oye, la estás recuperando, así que eso está muy bien, siempre que te siga gustando :) Además, estuviste en los dos lados, comprando y vendiendo y has visto lo bueno y lo malo de ambos. Ahora no se dirá tanto el chato, pero tampoco es tan raro, ¿no? Jaja, conozco la palabra, la entiendo y soy joven.
    Muy hermosos recuerdos con tu abuelito y tu tía.
    Y supongo que es lo que tienen los pueblos, que todos o casi todos se conocen y se saludan :)
    Un abrazo =)

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    1. Así es Natalia todo cambia, y perdí esas costumbre por falta de tiempo, no porque no me gustase, y ahora como lo que me sobra es tiempo, ahí estoy de nuevo vuelta a lo de antes. Me encanta ir y saborear esas sensaciones perdidas.

      Jaaja así que entiendes lo del chato, pues por aquí se dice bastante poco, si les pregunto a mis hijos no se si sabrán lo que es :)

      Muchos besitos y sonrisas conocidas :-)

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  15. Que tiempos aquellos...........madre mia. Lo relatas muy bien, no sé si es que yo lo recuerdo tal y como lo cuentas tu........no se.
    Lo mejor de todo tu relato........ya te digo....
    EL VIDEO!!!.........Besos.

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    1. Jaajjaja va a ser que lo recuerdas así porque tu lo viviste así también.

      Sabía que el vídeo te iba a gustar, me alegro.

      Besitos y sonrisas rosas :-)

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    2. Jeje, me alegro que te haya gustado tanto el relato como el vídeo, creo que lo vivimos de la misma manera.

      Besitos y sonrisas frescas :-)

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  16. En mi barrio ponen todos los jueves un mercadillo y la verdad es que no tiene nada que ver con las grandes superficies. Los vendedores ambulantes tienen una jerga especial para las mujeres que van a comprar. Las tratan de reinas, mi amor, guapas, rubias, morenas, vamos toda una serie de palabras para hacer que compren en su puesto.

    Todo se va perdiendo. Besos.

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    1. Me gusta ese mercadillo, esa gente te sube el ego, saben como ganarnos jaja. La verdad que tiene su encanto y como eso de revolver nos gusta tanto en general,yo disfruto de nuevo de ese placer.

      Besitos y sonrisas de compradora :-)

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  17. Me ha encantado la entrada, ver estas cosas de toda la vida que perduran con su encanto especial. precioso, de verdad. Un fuerte abrazo desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
    http://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/

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    1. Muchas gracias, me encanta que te haya gustado, así que puedes acompañarme este sábado jejej.

      Besitos y sonrisas perdurables :-)

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  18. Me acuerdo que hace 18 años estaba yo de viaje por Huancayo (Centro del Perú) y fui a un pueblo donde vendían animales vivos. Era alucinante.

    Saludos

    David

    Pd: He escrito un cuento en el blog, visitame cuando puedas.

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    1. YO aun me acuerdo de cuando los vendían, bueno eso no hace mucho que quitaron de hacerlo.

      Besitos y sonrisas vivas :-)

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  19. Como sabes, yo llegué a tu ciudad procedente de otra un poco más al sur, de esto hace casi 22 años. Y lo que más me hizo sentir como un lugar entrañable, fue la Plaza del Grano, innumerables rincones con sabor a historia, y ese mercado de la Plaza Mayor donde ahora lamento ver cada día menos paisanos del campo con sus conejos, pollos y huevos. Lamentablemente, no hay cambio generacional; y por otro lado, las normas sanitarias (que se torean en la producción a escala industrial) recaen sin piedad sobre los productos "caseros" o quizá se deberían reorientar del modo adecuado para que esta presencia no desaparezca. Habría mucho para hablar...
    Besines

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    1. Así es habría mucho que hablar, pero ese sabor a antes aun se conserva un poquito, cuando he vuelto a retomar esas compras he vuelto a mi niñez y me ha gustado. Ya quedan pocos rincones así.

      Besitos y sonrisas añoradas :-)

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  20. Son recuerdos imborrables, cuanto se disfruta rememorandolos.

    Por cierto, en mi nueva Entrada, he puesto una foto de cuando éramos novios vistiendo mi querida y añorada esposa la clásica Mantilla, que apreciarás, que entoces se llevaba el Rosario, para visitar los 7 Sagrarios.

    Saludos, manolo

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    1. Si así es.

      Pasaré a ver tus fotos.

      Besitos y sonrisas imborrables :-)

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  21. Leyendo tu post... he rememorado mi pasado, he vuelto muchos años atrás y recordado cuando con mis amigos, nos escondíamos en el mercado del pueblo, y jugábamos entre alcachofas, lechugas y patatas. Como nos encorrían los dueños, que recuerdos!.
    Gracias. Abrazo. Jabo

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    1. Jajaaj si haciendo diabluras que siempre quedan en el recuerdo.
      Me alegro habértelas recordado.

      Besitos y sonrisas escondidas :-)

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  22. Hace un momento hablaba con un amigo sobre los cambios, le decía que en los últimos 30 años se ha producido un cambio tal que sólo es comparable al que se producía cada siglo y medio en otras épocas. Esto hace que nos encontremos, muchas veces, sin las herramientas necesarias para poder enfrentar la realidad.
    Bien, para eso están los recuerdos, un hermoso territorio donde refugiarnos cuando queremos volver a encontrar algo de felicidad plena.
    Y esto te lo digo estando en una buena situación amorosa y económica, pues no pasa por allí.
    Por todo esto, y a pesar de las distancias, este blog es como un lugar mágico de reencuentros.
    Un cariño.
    HD

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    1. Tienes toda la razón, si me ñpongo a pensar mi vida ha evolucionado a marchar forzadas.
      Los recuerdos es lo único que es solo nuestro, nos quedan marcados a fuego.

      Muchas gracias por tus palabras y por venir a visitar este lugar mágico como dices tu.

      Besitos y sonrisas cariñosas :-)

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  23. En mi pueblo todavía hay mercado los sábados. No cómo el que describes, claro, pero todavía venden verduras y hortalizas, ropa, baratijas, etc.

    Y las pesas romanas... que recuerdos! Yo tenía una vecina que vendía en el patio de su casa y yo jugaba casi todos los días con esas pesas.
    Besicos, cielo.

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    1. Si ahora los mercados están llenos de todo.
      Que peculiar esas pesas ¿Verdad? A mi también me tenían fascinadas, me encantaba jugar con ellas.

      Besitos y sonrisas recordadas :-)

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  24. Hola, Mercedes, tocaya mía, tan 'Blanca como Blanco':
    Mucho he disfrutado con la descripción de tus días de mercado. También con las interesantes fotos al paso del tiempo.
    La esencia del mercado no desaparecerá por más que se impongan los mamotretos 'Áreas Comerciales' donde encuentras de todo, menos el encanto y el candor de un mercado al aire libre.
    Aún anda por el desván el artilugio Romana que mi suegra utilizaba para pesar los higos de la higuera a la venta. Tan exquisitos, tan verde claro con gota de miel, tan en su punto.
    Ahora al mercado lo han rebautizado como "Plaza": ¡Los martes, hale, que hay Plaza!
    (Los 'Chinos' ya se están planteando abrir un mercado...Y lo conseguirán)
    Celebro estar hoy por tu espacio.
    Besos abrazos y una sonrisa del tipo que sea, según pides.

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    1. Muchas gracias por acompañarme y por tus palabras.

      Esa esencia de la plaza sigue estando ahí, ya solo por el hecho de estar al aire libre y no encerrados para mi ya lo es todo.

      Gracias por venir a la "plaza" conmigo y volver a ver esas romanas.

      Besitos y sonrisas aireadas :-)

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  25. El próximo finde vamos a la plaza si o si ok? jaja
    hacía ya que no pasaba por aquí :)
    a la rica frutaaaaaa!
    muaaaaaaaaaaaaaaaaaaaack

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  26. Te tomo la palabra, así que vamos a la plaza jajaja.

    Así es me tienes abandonada bua, bua, bua jajaj.

    Besitos rey y sonrisas de las buenas :-)

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  27. Pues me gusta, haces mejor promoción que el Calleja y Frank de la jungla juntos.

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    1. Muchas gracias jajaaj, la tierruca que tira mucho.

      Besitos y sonrisas promocionadas :-)

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Gracias por entrar a dejarme una sonrisa del tipo que sea y si la acompañas de cuatro letras, aun mejor:)

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